“Maquedao con tu cara”. Hace
muchos años, una profesora cualquiera en un instituto público cualquiera de
nuestra geografía, me dijo que un mequetrefe de 2º de la ESO, le había dicho lo
escrito dos renglones más arriba: que se había quedado con su cara. Ella estaba
muy asustada porque ignoraba el significado último de esa expresión, que le
inquietaba y el zangandullo del otro, más flamenco que un ocho. Le expliqué a
la inexperta profesora que esa expresión no era sino parte de la llamada ley de
la memoria histórica, que ese gran gobernante e inolvidable presidente que fue
Zapatero impulsó para que hubiera otros cuarenta años de paz entre los
españoles… “¡Arriba España!”. A alumno le comenté que también lo conocía yo
bien y dónde vivía.
Recuerdo la noticia cuando
los medios la dieron. 2 de octubre del 17. Sentí un profundo escándalo y unas
bascas irreprimibles: un grupo de maestros, profesores, enseñantes, educadores…
que nada de eso absolutamente eran ni son, ni serán, movidos por el odio habían
pedido a unos niños, hijos de guardias civiles, que levantaran sus brazos en
clase para señalarlos en público, para marcarlos ante los compañeros, para
someterlos, sojuzgarlos, humillarlos… Por todos mis muertos y mis vivos… que me
he quedado con sus caras…
Se habla de que esos seres
anormales que supuestamente daban clases se olvidaron los más mínimos
principios educativos de cuando sea, donde sea, como sea… y se dedicaron, con
una cobardía, que les debía chorrear por sus asquerosas fauces, boqueras abajo,
de color mierda viscosa y densa… Siendo todos ellos, uno a uno, un montón de
mierda, escoria humana, personas degradadas, MALAS PERSONAS, que es el insulto
más degradante que les puedo dedicar… VOSOTROS SOIS MALAS PERSONAS… ¿a unos
chavales a quienes tienen la obligación de formar y enseñar y se dedican a denigrar,
afrentar, arrastrar…? SOIS UNAS MALAS PERSONAS. Y me he quedado con vuestras
caras.
¿Se puede saber dónde está
el movimiento en las redes, la manifestación sin límite que arrope a esos
padres, funcionarios públicos, que se juegan la cara por nosotros? ¿Esa
indignación que hunda en la mierda de que salieron a esos MALAS PERSONAS que
quisieron horadar el alma y el ser de unos chavales desvalidos porque sus
padres son guardias civiles? Esos padres, lo puedo firmar a ojos cerrados,
tienen una dignidad tan inimaginable para esa MANADA DE MALAS PERSONAS, PERSONAS
INDIGNAS, SUPUESTAMENTE DEDICADAS A LA ENSEÑANZA que sentirían, de tenerla,
solo con atisbarla, una vergüenza infinita.
Todo esto se borra
reconociendo lo hecho y pidiendo perdón privada y públicamente. Las penas que
se les pueden imponer son una basura comparadas con el daño hecho… a ellos a
esos chicos, a esas familias y también a mí y a usted, a poca dignidad que
usted también tenga. Sí, claro que sí: ME HE QUEDADO CON SUS CARAS. No hay odio
en mí, solo cumplimiento de una ley de Memoria histórica que tiene por fin que
cada realidad se quede en sus términos. Y esto, lo sucedido en el instituto “EL
PALAU”, tiene que no olvidarse y ponerse en su sitio. Me he quedado con
vuestras caras…
Quizá, si algún día nos vemos..., echemos unas gaseosas y unas risas juntos...
Parece que lo estoy viendo dar clase cuando le leo. Grandisimos recuerdos.
ResponderEliminarUn abrazo del galguillo