10 de agosto de 2025

25- DECLARADAS - El abogado de Francesco Arcuri: «El hijo mayor de Juana Rivas es, por desgracia, un juguete roto de la manipulación de su madre»

 


La mentira es moneda de cambio entre unos y otros y entre los otros y uno mismo. Tendemos a engañarnos para justificarnos y porque hay que seguir respirando y conviviendo con uno mismo y no es fácil coexistir con un mentiroso, con un falsario, con una mala persona y, por tanto, es más fácil engañarnos y decirnos algunas mentiras piadosas, y otras que no lo son tanto sino monstruosas, pero que nos ayudan a seguir caminando. “Mi matrimonio se rompió, pero nuestro divorcio fue amistoso” o civilizado: “Todo bien, entonces”… Oiga, perdone y los hijos del matrimonio… “Muy bien. Muy bien”.

Efectivamente los chicos del matrimonio, dependiendo de la edad y de sus caracteres, muy bien jodidos, estropeados… dañados de por vida. “¡A ver!: el amor se pasó. La vida cambia… Y hay que tomar nuevos caminos, nuevas soluciones. Tú por el tuyo y yo por el mío”. “Oiga, ¿y los hijos?”. “Pues por el de los dos. Unos raticos con ella, otros raticos conmigo y los usamos como niños torpedo para enviarlos a la otra parte suficientemente adiestrados contra ella”.

Esos niños hacen un curso acelerado de patriotismo como el que hacían los kamikazes japoneses, para destrozarse sobre la cubierta de papá o de mamá. Cantaba Serrat y “Les vamos transmitiendo nuestras frustraciones / Con la leche templada y en cada canción”. Sí, esos locos bajitos que terminan desquiciados ente lo que dice papá y afirma mamá… Entre lo que vemos y no comprendemos, entre lo que hemos aprendido a mirar con las gafas de papá y con las de mamá… ¡Lo que oímos, Dios mío!

¿¡Cuántos juguetes rotos!? ¡Ay, señor abogado!: si fueran juguetes los podríamos reponer, comprar unos nuevos, tirar los viejos… Lástima que eso no se puede hacer con las personas y el daño es de por vida: imágenes que se repiten, voces que resuenan con sus ecos, gestos… Juguetes sin recambio, sin repuestos, sin arreglo, de por vida.

Hoy no la nombraré a ella aquí. Bastante lo hice ya. Y una ideología roma detrás, una ideología que a ningún lugar bueno conduce…

¿Quiénes ganan? ¿Quiénes pierden? Y concluyo con otra DECLARADA: El juez Calatayud: «Me da pena el hijo de Juana Rivas, no se veló por sus intereses». Ya somos dos, señoría.

No hay comentarios:

Publicar un comentario